Otra vez los salvajes han
protagonizado un acto vil en Paris.
Otra vez los asesinos se
han llevado vidas por delante en nombre de un Dios.
Otra vez familias desechas
por culpa de unos fanáticos que viven a nuestro lado fingiendo ser "normales".
Otra vez nos sentimos
tristes y desesperanzados.
Otra vez estamos
amenazados.