La fecha de mi muerte

Lo que es la inspiración.
Días de sequía y de repente por un hecho fortuito en tu vida (fui a hacerme unas pruebas al hospital) se te ocurre una idea, coges la libreta y empiezas a escribir.

Espero que os guste.



LA FECHA DE MI MUERTE

Ya está. Las peores sospechas se han confirmado. Me muero.

Todos podemos decir con seguridad cuándo hemos nacido pero nadie puede decir con una certeza absoluta la fecha de su muerte.
En el día de hoy ya tengo una idea muy aproximada de cuando será ese momento.

Mi médico me ha recomendado que ponga todos mis asuntos en orden pues me queda poco tiempo para hacerlo. Ha sonado frío y distante pero es la cruda realidad.

He vivido de prestado desde que hace un tiempo me diagnosticaron la enfermedad.
He intentado luchar contra ella con tratamientos que lo único que me han producido son unos desagradables efectos secundarios sin darme resultado alguno.
Y ahora ha llegado el final de esta batalla donde la perdedora he sido yo.

Me pregunto cómo será morirse.
No me refiero a qué se siente físicamente, espero que cuando llegue el momento no sienta dolor (soy muy cobarde), sino a lo que me puedo encontrar más allá de la vida.
La muerte no me asusta.
Tengo curiosidad por ver si hay una brillante luz que te llama para que entres en ella, o si me reencarnaré en una hormiga o un elefante, o si me estarán esperando las delicias del paraíso con un montón de hombres guapos a mi disposición.
Espero que donde vaya mi dirección sea de subida y no de bajada. No he sido tan mala para merecer las llamas del infierno suponiendo que exista ese sitio.

Haré caso a mi médico y dejaré todo atado y bien atado aunque no sé qué más puedo hacer. No dejo en este mundo a nadie. Estoy sola y sola me iré.

He salido de la consulta médica y voy andando por la acera enfrascada con mis pensamientos.
Oigo el ruido de un motor acelerando y de pronto un frenazo. 
Siento un golpe. 
Veo oscuridad y... se acabó.....

Mi último pensamiento es que la fecha de mi muerte se ha adelantado.