Dos monarcas en la iglesia y en la vida civil

Hace un año (febrero de 2013) se dio la circunstancia de ver como un papa, Benedicto XVI,  renunciaba al desempeño del cargo (vitalicio) convirtiéndose en papa emérito (ya no ejerce como pontífice pero continua teniendo privilegios como el tratamiento de "Su Santidad") y también pudimos ver cómo, en un nuevo cónclave (marzo de 2013), salió elegido un nuevo pontífice, Francisco.
Hoy tras la abdicación de Juan Carlos I y la entronización de Felipe VI, España tendrá dos reyes.
Don Juan Carlos de Borbón y  doña Sofía de Grecia conservarán de por vida el título de rey y reina tras la coronación de su hijo.
Se había especulado que podría haber tomado el título que llevó su padre, don Juan, conde de Barcelona, pero no va a ser el caso.
El  título de rey será honorífico con tratamiento de Majestad y honores análogos a los establecidos para el heredero de la Corona.
Felipe VI y el gobierno pactarán las funciones que don Juan Carlos deberá desempeñar a partir de ahora.
Perderá su inviolabilidad (estar exento de responsabilidad en todos los órdenes, sean penales, civiles, laborales, fiscales,... por cualquier acto realizado. - Artículo 56.3 de la Constitución Española-) y pasará a ser aforado (privilegio defensivo para proteger a los cargos públicos de querellas maliciosas. Serían juzgados por el Tribunal Supremo para cargos nacionales y por el Tribunal Superior de Justicia para los cargos autonómicos)
Muchos opinan que esto es desproporcionado ya que en otros países con abdicaciones recientes, como Holanda o Bélgica, los reyes salientes se han quedado sin protección.
Pienso que no debería ser ni una cosa ni la otra. La persona de don Juan Carlos debe tener un aforamiento pero no completo como se le quiere dar.
¿Por qué no se le podría juzgar, como a todo hijo de vecino, si en el ámbito de su vida privada comete un delito?

Como final de esta entrada diré que antiguamente un papa o un rey eran viejos con 70 años.
Hoy la esperanza de vida es más larga, por lo que siendo cargos vitalicios se podría dar la circunstancia de haber papas o reyes muy ancianos como pasó con Juan Pablo II que murió con gran deterioro físico y mental a los 84 años (Pío IX murió con 86 años).
El monarca de más edad actualmente es Isabel II del Reino Unido con 88 años y en plenas facultades mentales y físicas. El problema es el heredero, Carlos de Gales,  que ya tiene 65 años.
Quizá se debería  empezar a ver como normal la limitación temporal de sus mandatos.

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